Por aquí ya huele a vacaciones y este año tiramos la casa por la ventana, porque después de todo el año currando de lo lindo vamos a gastarnos la pasta y nos vamos de vacaciones a Eslovenia. Será la primera vez que mi hija viaje en avión, y la segunda de mi hijo, pero como si fuera la primera. Así que estamos todos de los nervios deseando que llegue el momento.
Este viaje lo he preparado con mucha ilusión, ya que es un lugar que tenía pendiente desde hace muchos años y un destino perfecto para disfrutarlo en familia. Eslovenia es un país pequeño donde la naturaleza es su principal atractivo turístico, por lo que lo veo un lugar ideal para viajar con niños y descubrir sus lagos, montañas, cascadas, gargantas, cuevas, castillos, pueblecitos, su costa, … Incluso la capital, Liubliana cuenta con varios centros termales en los que hay toboganes para los niños y no tan niños.😜
Para que los niños estén entretenidos en algunos momentos de coche, durante las comidas o para cuando ellos quieran, he preparado un diario de viaje de Eslovenia para que dejen plasmadas sus aventuras y además puedan aprender cosas del país y practicar escritura, matemáticas, dibujo, … Con el día a día, incluso en vacaciones no dejamos de aprender.
El diario se compone de varias páginas para cumplimentar, entre ellas un pasaporte y una lista para preparar las maletas y las cosas que necesitamos para el viaje. Esto lo cumplimentarán unos días antes de empezar el viaje para tenerlo todo listo y que no se nos olvide nada. Luego tendrán que buscar algo de información para así ir conociendo el país, familiarizarse con el mapa, crear una ruta y mirar cuantos kilómetros hay, que queremos visitar, crear un presupuesto y llevar los gastos diarios y por supuesto plasmar cada día aquello que hemos visitado ya sea escribiendo, dibujando, pegando imágenes de folletos, decorándolo cada uno a su gusto.
Ahora solo nos queda vivir y disfrutar del viaje, de las vacaciones y de todos los momentos y experiencias que nos llevemos. Porque la vida se compone de vivencias, sin ellas, no seríamos los mismos. Y porque viajando se aprende a vivir, a conocer otros mundos, otras culturas, y todo eso te enriquece personalmente.
A la vuelta os cuento como ha ido!!
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